Según nos dice la doctora en ciencias históricas, Francisca López Civeira en su libro, con la Revolución de Céspedes en 1868, el ascenso a los más altos grados militares de hombres de procedencia humilde, de grupos históricamente marginados, como los negros y mulatos, permitió que estos accedieran a los planos de dirección en el orden militar, con lo que le daban al proceso revolucionario y sus proyecciones un contenido popular. Por Ismael Rensoly